El racionalismo arquitectónico corresponde a una tendencia introducida en Europa a comienzos del siglo XX, que mantiene un fuerte compromiso con las conquistas de la estética del cubismo. La experiencia de la Bauhaus (1919) es decisiva para el desarrollo de un linaje racionalista en el campo de la arquitectura. Las investigaciones formales y las tendencias constructivistas realizadas con lo máximo de ahorro en la utilización del suelo y en la construcción; la atención a las características específicas de diferentes materiales (madera, hierro, cristal, metales, etc.), la idea de que la forma artística proviene de un método o problema previamente definido, lo que conduce a la correspondencia entre forma y función; y el recurso permanente a las nuevas tecnologías están entre los principales postulados de la escuela creada y dirigida por Walter Gropius (1883 - 1969).
El léxico de base cubista y constructivista adoptado por los arquitectos incluye el uso sistemático de formas elementales en la composición arquitectónica, con objeto de obtener simetría, equilibrio y regularidad en el conjunto diseñado. La utilización de nuevos materiales, la estructura aparente, las cubiertas planas, la sencillez de la ornamentación, las grandes superficies encristaladas y la preocupación por el espacio interno del edificio constituyen otros puntos centrales de la llamada arquitectura racionalista.
El léxico de base cubista y constructivista adoptado por los arquitectos incluye el uso sistemático de formas elementales en la composición arquitectónica, con objeto de obtener simetría, equilibrio y regularidad en el conjunto diseñado. La utilización de nuevos materiales, la estructura aparente, las cubiertas planas, la sencillez de la ornamentación, las grandes superficies encristaladas y la preocupación por el espacio interno del edificio constituyen otros puntos centrales de la llamada arquitectura racionalista.
Casa Curutchet, Le Corbusier
Casa del Fascio , Giuseppe Terragni
Además de Gropius, los nombres de Mies van der Rohe (1886 - 1969) y Le Corbusier (nacido como Charles-Édouard Jeanneret, 1887 - 1966) están entre los más importantes exponentes de la arquitectura moderna - de corte racionalista y funcionalista -, que se disemina por todo el mundo en las primeras décadas del siglo XX. Le Corbusier, en especial, se hace célebre en la escena internacional, entre 1920 y 1960. Pintor y escultor, además de arquitecto y urbanista, tiene intensa participación en los debates de las artes visuales, sobre todo a causa de la revista L'Esprit Nouveau (1920-1925) y del purismo que defiende en el manifiesto Après le cubisme (1918). Pero son los ensayos reunidos en Vers une Architecture (1923) que le confieren reconocimiento internacional como autor de los principios de la nueva arquitectura, anclada en el plano racional y en la funcionalidad. Los cinco elementos que definen su programa son los pilotes, la planta libre, el balcón jardín, la fachada libre y las ventanas horizontales. Los principios centrales del método de trabajo y de la filosofía urbanística de Le Corbusier - el uso racional de los materiales, métodos económicos de construcción, lenguaje formal sin ornamentos y diálogo sistemático con la tecnología industrial - ejercen fuerte influencia en la arquitectura moderna brasileña, sobre todo por sus sucesivas venidas al país.
La primera visita de Le Corbusier remonta a 1929 y se da por intermedio del poeta Blaise Cendrars (1887 - 1961). En esa época conoce a Gregori Warchavchik (1896 - 1972), responsable de las primeras viviendas modernas en Brasil. Nacido en Rusia y graduado en Italia, Warchavchik conoce la obra de Gropius y Le Corbusier antes de emigrar a Brasil, en 1923. Sus obras - por ejemplo, la casa de la calle Santa Cruz, en el barrio Vila Mariana, en São Paulo (1927-1928) - reflejan su preocupación por fundir funcionalismo y cubismo arquitectónicos. Si las realizaciones de los grandes urbanistas y arquitectos modernos se dan a conocer en Brasil por intermedio de Warchavchik, de Rino Levi (1901 - 1965), de Carlos Leão (1906 - 1983) y de los hermanos Marcelo y Milton Roberto, responsables de la sede de la Associação Brasileira de Imprensa - ABI [Asociación Brasileña de Prensa] en Río de Janeiro (1936) - una de las primeras obras de la nueva arquitectura en el país -, es la visita de Le Corbusier, en 1936, la responsable del impacto efectivo de sus concepciones sobre toda una generación de jóvenes arquitectos brasileños.
La invitación que recibe Le Corbusier para trabajar como consultor del proyecto para la sede del Ministério de Educação e Saúde [Ministerio de Educación y Salud] (1936-1943), en Río de Janeiro, es hecha por el ministro Gustavo Capanema y por el grupo liderado por Lucio Costa (1902 - 1998), en el que participan Affonso Eduardo Reidy (1909 - 1964), Carlos Leão, Jorge Moreira (1904 - 1992), Ernani Vasconcelos (1912 - 1989) y Oscar Niemeyer (1907), jóvenes que tienen cerca de 20 años, conocedores de la obra de Le Corbusier. El edificio del Ministério de Educação e Saúde [Ministerio de Educación y Salud] (actual Palacio Gustavo Capanema), un hito de la arquitectura moderna en Brasil, refleja el intento del grupo de incorporar los preceptos racionales de la arquitectura corbusiana: la adopción de formas sencillas y geométricas, el térreo con pilotes, el balcón jardín, la fachada encristalada, las aberturas horizontales, la integración de los espacios interior y exterior, el aprovechamiento de la ventilación y luz naturales a través del uso de láminas móviles y el trabajo con volúmenes puros, basado en el cruce de un cuerpo horizontal y otro vertical. El proyecto destaca, además, como la primera realización mundial de la curtain wall (fachada encristalada orientada hacia el lado menos expuesto al sol) y la primera utilización del brise-soleil en amplia escala, inventado tres años antes por Le Corbusier (ya se había utilizado el brise-soleil en el edificio de la ABI y en la Obra do Berço [Obra de la Cuna], 1937, - pequeña escuela maternal en Botafogo, cuyo autor es Niemeyer). Las influencias de Le Corbusier, visibles en el proyecto del Ministério de Educação e Saúde, no impiden el reconocimiento de las nuevas soluciones dadas por el grupo local, recuerda Yves Bruand, sobre todo el dinamismo y ligereza del conjunto y la fuerte integración entre arquitectura, paisajismo y artes plásticas.
Las influencias del racionalismo arquitectónico de Gropius, Mies van der Rohe y Le Corbusier pueden sentirse en las obras de diversos arquitectos brasileños, conociendo en cada uno de ellos inflexiones particulares. Por ejemplo, en los proyectos para el Parque Hotel São Clemente, en Nova Friburgo (1944), y en los edificios del parque Guinle, en Río de Janeiro (1948-1954), Lucio Costa establece su vínculo con el racionalismo, lo que puede percibirse, entre otros, por el uso de las láminas horizontales sobre pilotes, por las fachadas encristaladas o con brise-soleils y por el alejamiento de los ambientes con respecto a la cara principal del edificio. Además, la obra de Oscar Niemeyer refleja la fuerte inspiración en el racionalismo de Le Corbusier, como en el Grande Hotel [Gran Hotel] de Ouro Preto (1940), en el conjunto de la Pampulha (1942-1944) y en el parque Ibirapuera (1951). Si las marcas corbusianas son visibles en los proyectos de Niemeyer, éstos se hacen célebres por la gran libertad plástica, contrariando frecuentemente la geometría racionalista. Las columnas en forma de "v" y "w", los arcos y bóvedas, las líneas curvas, los diseños ondulantes y las formas sinuosas son algunos de los trazos característicos de su arquitectura. Otros ejemplos derivados de la estética racionalista pueden encontrarse en las obras de Affonso Reidy, como el Conjunto Habitacional Pedregulho, (1950-1952); de Lina Bo Bardi (1925 - 1992), en el proyecto del Museu de Arte de São Paulo - Masp (1947) [Museo de Arte de São Paulo]; de Ícaro de Castro Mello (1913 - 1986), responsable, entre otros, de la piscina cubierta del parque de Água Branca, en São Paulo; de Diógenes Rebouças, del Centro Escolar Carneiro Ribeiro, en Salvador (1950-1963); y de Henrique Mindlin (1911 - 1971), con el Edificio Avenida Central, en Río de Janeiro (1958-1961), inspirado en los rascacielos de Mies van der Rohe. La literatura hace referencia a la experiencia de modelado urbano llevada a cabo por Luiz Nunes (1908-1937) en Recife, al frente de la Diretoria de Arquitetura e Urbanismo [Dirección de Arquitectura y Urbanismo] en los años 1930, como inspirada desde cerca en la Bauhaus, sobre todo en Gropius (por ejemplo, Hospital da Brigada Militar, Recife, 1935-1937).
Pabellon Aleman de la exposición de Barcelona, Ludwig Mies Van der Rohe
Mi inclinación por esta corriente arquitectónica se debió a que, después de leer sobre las diferentes vanguardias, me pareció la más interesante debido a que se centra en dos cuestiones que a mí como estudiante de arquitectura me parecen ser los principales principios a los que se les debería tomar en cuenta en el momento de resolver y hacer arquitectura: la función y la forma, la limpieza y simpleza de sus espacios. He decidido que retomare los principios de esta corriente arquitectónica para desarrollar el diseño de mi proyecto, además de que este primer acercamiento podría dar forma al estilo el cual desarrollare en un futuro y en mi vida como arquitecto.
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